Yutsil Cruz
Colocar la colección de discos que conforma Tepis compnay en el museo, sin la autorización de su venta debido a su carácter apócrifos, forzó al proyecto a generar una dinámica diferente en la manera de exhibirse y ofrecerse al público interesado. Una de las intenciones consistía en que el objeto no perdiera su utilidad comercial y su valor de exclusividad. El intercambio fue mediante un “donativo”, la diferencia es que la gente daba la cantidad que quisiera. Los dos días en los que se realizaron las actividades el intercambio fue directo, los demás días la gente podía tomar únicamente los que estaban en el piso y en un bote con el letrero: donativo $10 dejar su coperación, asunto que generó algo de confusión, varios dejaron su donativo. Mientras la colección de discos Tepis company se exhibía en el museo, Pepe uno de los comerciantes invitados, especialista en salsa, ya había tomado la iniciativa de sacar su propio tiraje de la selección que había estado a su cargo.
La primera vez que le enseñé el diseño que había hecho para las portadas de su selección musical, me había dicho que sí le gustaba, en una segunda ocasión me mostró los estuches intervenidos y modificados por él, había adherido nuevos elementos y resaltado partes del diseño inicial que si le habían gustado. Los nuevos discos estaban realmente mejorados en su presentación y eran exclusivos para un regalo personal. A partir de estos nuevos modelos Pepe inicio la venta de los nuevos discos a un precio un poco más elevado que el precio del resto de discos que tiene en su local. Finalmente su selección musical comenzó a circular entre su banda y sus clientes frecuentes. Tepis company adquirió otro valor una vez que se colocó en tepito, un significado distinto al que tuvo en el museo, quizá el formato de exhibición sea inútil en relación a las posibilidades que puede alcanzar al desarrollarse dentro de la misma estructura comercial que caracteriza a tepito.